Cabuxa

La poesía pictórica de Yoshiro Tachibana en la colección Cabuxa

Quienes lo han visitado, cuentan que Japón y Galicia son como esos hermanos lejanos que, a pesar de la distancia, mantienen su esencia. Ambos lugares comparten un clima húmedo y fértil que favorece especies tan “icónicas” como la camelia o el cerezo. También coincide el respeto por las tradiciones, la veneración por los mayores y un modo muy particular de entender la espiritualidad, y ¡cómo no!, el amor incondicional por la cocina tradicional, natural y sin artificios… Quizás fue esta suma de “coincidencias compartidas” las que trajeron a Yoshiro Tachibana, el artista y poeta del sol naciente, hasta tierras del sol poniente. Concretamente al “finisterrae” gallego. En el pequeño pueblo de Muxía (A Coruña), Nino —como todos lo conocían— encontró la paz y la armonía vital que buscó durante años por medio mundo.

Nadie desaparece del todo mientras se le recuerde, por eso —a escasos días del primer aniversario de su fallecimiento (Kobe,1941 – Muxía 2016)— queremos dedicar este post al amigo y artista que pintaba “para aquellos que saben apreciar la luz y la armonía”. Porque para Yoshiro, la pintura era felicidad, equilibrio y armonía. Yoshiro era un animista, su arte nacía del interior y lo proyectaba al exterior con una mística maravillosa que tenía como inspiración la naturaleza; los paisajes suaves y verdes de Galicia influyeron en su obra como un estado de ánimo. Sus composiciones aludían a un planteamiento holístico de la vida que expresaba a partir de árboles, animales, formas orgánicas, luces… y personajes donde la feminidad era protagonista. “La mujer es luz. Por eso retrato mucho el carácter femenino en mis cuadros”.

Para conocer a Nino había que subir al monte Corpiño, un entorno rocoso que él mismo transformó en una increíble floresta. En su casa minimalista se respiraba la misma paz que destilaba su sonrisa tranquila; allí, rodeado de sus obras, nos enamoramos de su poesía pictórica y Nordic Vàren (‘Primavera Nórdica’, fruto de su estancia en el país), resultó ser una composición perfecta para estampar de forma artesanal sobre la piel. El equilibrio entre la serenidad del paisaje y la vibrante paleta de colores —en la que se aprecia su admiración por la obra de Klee—, protagoniza una colección de edición limitada que elaboramos en una suave piel de tonos violetas. La colección Nordic Vàren está compuesta por una veintena de piezas entre las que destacamos el bolso bombonera “Abril”, el bolso “Urbano”, el bolso “Cabuxa” y la cartera portadocumentos, una pieza única que, al igual que el resto de los accesorios, pequeña marroquinería y piezas de escritorio, todas llevan la firma del artista y están distinguidas con el sello “Artesanía de Galicia”.

Decía Nino, “antes de morir, mi meta es ser más libre para lograr pintar como un niño”. Nosotros siempre lo recordaremos así, libre, mágico, irrepetible…